Un programa que asegura la continuidad de estudios en contextos de vulnerabilidad, integrando altas expectativas, apoyo familiar y vínculos con la educación superior para abrir caminos de movilidad social.
Descripción
Desde 2015, el Colegio Bicentenario de Excelencia Cardenal Carlos Oviedo implementa el Programa de Continuidad de Estudios, un modelo integral que articula preparación académica y socioemocional, acompañamiento familiar, vínculos con instituciones de educación superior y seguimiento a egresados, con el propósito de asegurar acceso y permanencia en trayectorias educativas. Con un enfoque de altas expectativas y gestión basada en datos, el programa acompaña a estudiantes desde 8º básico hasta el primer año en educación superior. Sus resultados son contundentes: en 2023, el 77% de los egresados accedió a estudios superiores, y en 2025 el colegio fue reconocido entre el Top 10 de los World’s Best School Prizes en la categoría Innovación centrada en el estudiante.
1. ¿Cuál es el problema o necesidad que busca resolver?
Históricamente, los jóvenes de alta vulnerabilidad han enfrentado una baja probabilidad de acceder y mantenerse en la educación superior, debido a brechas académicas, falta de información, escaso capital cultural y limitaciones económicas. En particular, el colegio identificó que muchos estudiantes eran primera generación en acceder a la universidad o a instituciones técnicas, lo que aumentaba la incertidumbre y la deserción temprana. La necesidad era clara: diseñar un itinerario integral y continuo que asegurara no solo el ingreso, sino también la permanencia y éxito de los estudiantes en la educación superior.
2. ¿Cuál es la innovación educativa implementada?
El Programa de Continuidad de Estudios se organiza en un modelo secuencial que acompaña a los estudiantes desde 8º básico hasta el primer año posterior al egreso, articulando cuatro pilares fundamentales:
1. Preparación académica y formativa: refuerzos y tutorías personalizadas, preparación sistemática para la PAES, orientación vocacional continua y desarrollo de habilidades socioemocionales.
2. Trabajo con familias: inducción a trayectorias postsecundarias, información clara sobre becas y beneficios, y corresponsabilidad activa entre hogar y colegio.
3. Acceso y vínculos con la educación superior: ferias vocacionales, visitas a universidades, institutos y CFT, programas puente y acompañamiento en el proceso de postulación y financiamiento.
4. Apoyo a egresados: seguimiento de cohortes, monitoreo mediante alertas tempranas y derivaciones a apoyos académicos, socioemocionales o económicos que permitan la permanencia.
El modelo se gestiona con decisiones basadas en datos, alianzas sólidas con instituciones de educación superior y un enfoque transversal de altas expectativas que permea toda la cultura escolar.
3. ¿Quiénes participan en el proyecto?
El proyecto es liderado por el Encargado de Continuidad de Estudios, quien coordina el itinerario y participa en la red de encargados de la Fundación Belén Educa. Colaboran el área de Orientación, a cargo de la preparación académica y formativa, junto a docentes y dupla psicosocial, que refuerzan aprendizajes y bienestar. Los estudiantes ejercen agencia investigando carreras, calculando puntajes y definiendo metas, mientras los ex alumnos acompañan a IV Medio mediante charlas y talleres motivacionales. Las familias y la Red Belén Educa complementan el trabajo con apoyo y articulación externa, consolidando un modelo de continuidad con impacto comunitario.
4. ¿Cuál es el rol de las y los estudiantes en el proyecto?
Las y los estudiantes son protagonistas en todas las etapas del itinerario. Desde la identificación de intereses y establecimiento de metas personales, participan en ferias, visitas y talleres de orientación entre pares. Gestionan su propia postulación a la educación superior con acompañamiento, mantienen el contacto como egresados mentores y entregan retroalimentación constante sobre los apoyos que requieren. Este rol activo les permite desarrollar autonomía, liderazgo y sentido de pertenencia a una comunidad que confía en su potencial.
5. ¿Cuáles fueron los principales desafíos que se presentaron en las diversas etapas del proyecto?
Los principales retos han sido superar las brechas académicas iniciales, acompañar a familias sin experiencia previa en educación superior, enfrentar la incertidumbre financiera y sostener la permanencia de los estudiantes en su primer año de educación superior. Para abordarlos, se implementaron tutorías focalizadas, talleres de preparación PAES, simulacros, protocolos de postulación y seguimiento sistemático de cohortes, junto con la generación de alertas tempranas que permitieron derivaciones oportunas.
6. ¿Cuáles han sido los resultados?
El impacto del programa es evidente: en 2023, el 77% de los egresados accedió a la educación superior (51% a universidades, 20% a institutos profesionales y 28% a centros de formación técnica). La retención escolar interna también se fortaleció, así como la preparación docente frente a las exigencias del mundo postsecundario. El reconocimiento comunitario ha validado la experiencia como un modelo efectivo de movilidad social. En 2025, el colegio fue destacado internacionalmente como Top 10 en los World’s Best School Prizes en la categoría "Innovación centrada en el estudiante”.
7. ¿Cuáles son las proyecciones o próximos pasos de la innovación?
Las metas futuras apuntan a profundizar en la permanencia durante los primeros tres años de educación superior, mediante mentores egresados, apoyos de bienestar y ayudas económicas. Se busca documentar y transferir el modelo a otros establecimientos en contextos similares, ampliar la articulación con especialidades Técnico-Profesionales a través de programas de alternancia, y consolidar un tablero de datos de cohortes. Finalmente, se proyecta formalizar esta innovación dentro de los instrumentos de gestión institucional —PEI, PME y Plan de Reactivación— para asegurar su sostenibilidad y replicabilidad.